Foto: Paige Cody
¿Sabías que al nacer, el cerebro de tu bebé es solo un cuarto del tamaño del de un adulto? Durante los primeros tres años, este pequeño órgano crece a un ritmo asombroso, lo que hace que esa etapa sea crucial para ayudar a tu pequeño a alcanzar su máximo potencial. Descubre cómo la música puede ser una herramienta invaluable en el desarrollo de tu bebé en este artículo. ¡No te lo pierdas!
Equipo Duérmete Niño
Agosto 2024 · 6 minutos de lectura
Al nacer, el cerebro de un bebé tiene un poco más de un cuarto del tamaño del cerebro de un adulto. Durante los primeros tres años de vida, el cerebro crecerá significativamente, alcanzando lentamente su tamaño definitivo.
Este hecho biológico nos ayuda a comprender por qué los primeros años son tan cruciales para que el bebé desarrolle su máximo potencial. Escuchar música parece ser una excelente manera de lograrlo.
Muchos factores pueden contribuir a crear un entorno adecuado y estimulante, fomentando su cognición y habilidades durante los primeros tres años, pero ofrecer un ambiente musical, cantar canciones y bailar al ritmo de la música es, sin duda, una forma muy placentera y efectiva de ampliar los horizontes de tu bebé.
Recientes investigaciones en el campo de la música han encontrado que esta tiene un efecto positivo en los seres humanos en general y en los bebés y niños pequeños en particular.
Explora esta playlist con canciones para bebés y dale a tu pequeño el regalo de un entorno musical enriquecedor.
Los beneficios de escuchar música son numerosos. Este artículo no pretende abarcarlos en su totalidad, sino más bien ofrecer una breve introducción a este fascinante campo de estudio. Busca delinear la influencia que la música tiene en el cerebro y mostrar su impacto en nuestro bienestar tanto físico como emocional.
La percepción musical precede a la habilidad de entender el lenguaje. De hecho, la percepción musical es la base para adquirir el lenguaje. Algunas publicaciones sugieren un vínculo directo entre la comprensión de conceptos y las emociones. Uno de los primeros conceptos que un bebé puede captar es el estado de ánimo de su madre, al escuchar el ritmo y la tonalidad de su habla. Podemos decir que aprende a identificar su estado emocional a través de la "música de su voz". Mucho antes de que el bebé sea capaz de comprender el lenguaje, ya entiende la música que está en su esencia.
Los bebés tienen un oído muy musical y pueden distinguir entre música alegre y triste. Un estudio realizado en la Universidad Brigham Young en los EE. UU. encontró que los bebés de 9 meses eran capaces de diferenciar entre música feliz y triste, de la misma forma en que podían reconocen las diferencias entre rostros alegres y tristes.
Los pequeños además pueden identificar diferentes instrumentos musicales. Una investigación llevada a cabo en la Universidad McGill en Canadá demostró que los bebés de 8 meses podían diferenciar entre distintas piezas compuestas por Ravel y podían distinguir entre recitales de piano y piezas musicales interpretadas por una orquesta. Adicionalmente, se observó que podían recordar las piezas musicales y reconocer la diferencia entre ellas dos semanas después de haber sido expuestos a la música.
Como podemos ver, nuestra capacidad para escuchar y distinguir está altamente desarrollada desde una etapa muy temprana y además somos capaces de recordar experiencias musicales desde muy pequeños.
Las investigaciones han concluido también que los bebés prefieren la música consonante por sobre la disonante. En otro estudio, a los pequeños se le mostraron piezas de música clásica (como el Minuet de Bach) grabadas en dos versiones: una armoniosa y la otra disonante. Los bebés mostraron una clara preferencia por las versiones armoniosas de las obras.
Aquí encontrarás ejemplos de piezas clásicas en versiones especialmente ideadas para relajar a tu bebé.
Muchos investigadores creen firmemente que la música juega un papel importante en la construcción de la base emocional de los bebés y en ayudarles a desarrollar la confianza.
Además, los estudios sugieren que la música también puede ayudar a establecer una relación saludable entre los bebés y sus cuidadores. Algo que padres y madres de todas las culturas ponen en práctica intuitivamente cuando cantan a sus niños, convencidos de que estas melodías pueden calmarlos y fortalecer su conexión emocional.
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La música puede fomentar la formación de relaciones sociales y ayudar en el desarrollo de habilidades sociales. Los seres humanos somos los únicos mamíferos que creamos música, cuya función evolutiva sigue siendo un enigma para muchos investigadores.
En muchas culturas, la música, la composición musical y el baile son una parte inseparable de la vida. Su gran significancia social ha conducido a la suposición de que esta juega un importante rol en ayudar a los niños a relacionarse con sus pares. En otro experimento que busca respaldar esta idea, se les dio a niños de cuatro años la opción de participar en diversas actividades grupales. El grupo que se centró en cantar y bailar juntos fue el que mostró la mayor interacción social entre los niños.
La formación musical también puede ayudar a desarrollar la imaginación y la capacidad de visualización auditiva. Mediante técnicas de neuroimagen se identificó que la zona del córtex encargada de escuchar y descifrar la música también se ocupa de la imaginación y la visualización auditiva.
Como parte de la investigación anterior, se les pidió a los participantes que escucharan música y luego realizaran diversos ejercicios de visualización auditiva (musical y no musical) y no auditiva. Los resultados fueron claros: quienes escucharon música tuvieron un mejor desempeño en los ejercicios de visualización auditiva musical y no musical. Mientras que no pareció haber diferencias entre los grupos en los ejercicios de visualización sin componentes auditivos.
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La música es una maravillosa herramienta para apoyar el desarrollo de tu bebé, ayudando a estimular su cognición y a fortalecer el vínculo emocional entre ustedes. Al incluir melodías suaves y canciones en su rutina diaria, ya sea a través de música grabada o cantando juntos, puedes crear un ambiente enriquecedor que fomenta su crecimiento y conexión.
Cada melodía puede contribuir a un momento especial, así que disfruta de la música con tu pequeño y observa cómo florece su potencial en un entorno lleno de amor y alegría.
Si te interesa profundizar en algunas de las investigaciones que han inspirado los artículos de nuestro blog, aquí podrás encontrar una lista de referencias de investigaciones sobre los efectos de la música en la primera infancia.
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